Se trata de una obra pensada para el público adulto y compuesta de varias partes: un diálogo entre una vieja de suburbio, Ubalda, y la Virgen María escrito por María de la O Lejárraga en el primer tercio del siglo XX; otra parte dedicada a glosar la vida de don Joaquín Costa, en otra también se recuerda la sublevación de los capitanes republicanos en Jaca en diciembre de 1930, Galán y García Hernández, y por otro lado están las greguerías de Ramón Gómez de la Serna en tiempos de la República. Todo ello mediante títeres, objetos y música.